Los primeros contactos con Juan Acevedo no fueron muy optimistas, pero con el tiempo sentí que fueron importantísimas esas charlas, en el fondo sentía que Juan me estaba dando una clase sobre plantas sagradas, y como moverme para lograr la realización del documental, yo lo entendía perfectamente, sabía lo que él me decía, sabía que la vieja guardia venía con el caballo cansado, veía que con el crecimiento de las redes sociales aparecían personajes que nada tenían que ver con estos conocimientos ancestrales. Y también a mi alrededor comenzaron a pasar situaciones que nada tenían que ver con el respeto a estas plantas.

A Juan Acevedo Peinado lo conozco gracias a sus dos libros “Plantas Sagradas 1 y 2”, quedé maravillado con la lectura de sus obras, tal es así que comencé a ver la forma de ubicarlo y poder hablar con él. Fue así que en el 2020 pude obtener su número de teléfono, y le mandé un audio de 4 minutos explicándole mi idea, que tampoco estaba tan clara, debo admitir que no sabía por dónde arrancar, sabía que debía comenzar con entrevistas, ya tenía una de Axel Wayra, y dos de Francisco Herminio Torres, pero Juan parecía la “figurita difícil”, y hoy puedo afirmar que fue excelente idea esperarlo hasta que concretar esa entrevista.

Por primera vez, pude conocerlo personalmente en la visita de Julia Calderón, curandera peruana, donde participé de un encuentro ceremonial con mayúsculas. Me sorprendió el temple y el manejo de estos conocimientos que vi en Julia Calderón, merece nota esa ceremonia.

Finalmente lo visité en su casa de Quilmes, en el invierno del 2023, me recibió con los brazos abiertos junto a Mariana, su compañera. No podía ser de otra manera, su casa está ubicada cerca de la avenida Calchaquí.

Sabía que era mi momento, que debía aprovechar esa charla, y así fue…Salvo que en el momento de hablar de Chelemin me quebré, cuando Juan dijo… Chelemin no peleaba contra los españoles, Chelemin peleaba contra el futuro.

Una entrevista y charla de 80 minutos. Fue así que volví a la Patagonia con el recurso que me faltaba, y el material comenzó a tener una estructura sólida y a crecer.

Gracias Juan…